
Para el bizcocho:
2 huevos
5 cucharadas de azúcar
5 cucharadas de leche
3 cucharadas de aceite
1 cucharada de azúcar vainillado
2 cucharas de café de levadura química
30 g de fécula de maíz
70g de harina
Un poquito de zumo de naranja para regar el bizcocho.
Crema 1:
las yemas de 3 huevos
125g de azúcar
50g de fécula de maïz
1 cucharada de azúcar vainillado
500 ml de leche
60g de mantequilla
3 hojas de gelatina halal (o agar agar)
Crema de chocolate:
130g de chocolate negro
130g de queso para untar
100g de azúcar
2 hojas de gelatina halal (o agar agar)
20 cl de nata para montar.

Separar las yemas de las claras.
Batir las yemas con el azúcar y el azucar vainillado.
Añadir el aceite, y la leche y batir.
Añadir la harina, la levadura y la fécula de maíz y batir bien.
Montar las claras a punto de nieve con una pizca de sal.
Añadir las claras montadas a la preparación y mezclar delicadamente con una espátula de abajo hacia arriba.
Poner la preparación en un molde engrasado y enharinado.
Hornear el bizcocho en un horno previamente calentado a 180º.
Una vez el bizcocho preparado, cortarlo con un aro para pasteles, y mojarlo un poquito con el zumo de naranja.
Preparar la crema 1:
Batir las yemas con el azúcar, añadir la fécula de maíz y mesclar bien.
Añadir la leche y batir.
Poner la preparación sobre el fuego sin dejar de remover hasta obtención de un crema firme.
Añadir la mantequilla a la crema y mezclar.
Poner las hojas de gelatina en una cacerola con 3 cucharadas de agua y diluirlas sobre el fuego unos segundos.
Añadir las hojas de gelatina diluidas a la crema y mezclarla.
Verter la crema sobre el bizcocho sin quitar el aro, y ponerlo en la nevera para que cuaje mientras se prepara la crema de chocolate.
Para la crema de chocolate:
Fundir el chocolate en baño maría.
Poner el queso con el azúcar y el chocolate fundido y batirlo todo.
Poner las hojas de gelatina en una cacerola con 3 cucharadas de agua y diluirlas sobre el fuego unos segundos. y luego añadirlas a la crema de chocolate.
Montar la nata y añadirla a la crema de chocolate.
Sacar la tarta de la nevera y verter la crema de chocolate encima de la crema de vainilla.
Poner una vez más la tarta en la nevera y dejar enfriar bien antes de servirla.
Espero que os guste.